La selenita es una piedra de paz y claridad mental, ideal para equilibrar la energía del cuerpo y el espíritu. Grabada con un símbolo de meditación, esta placa potencia la calma, la concentración y la conexión interior, creando un ambiente perfecto para la práctica espiritual. Colócala en tu altar, espacio de yoga o rincón de meditación para armonizar y elevar la vibración del lugar.