Esta sortija con granate es un símbolo de fuerza interior y renovación de energía. En la espiritualidad, el granate está asociado con el impulso vital, la motivación y la pasión por lo que uno ama. Su color profundo recuerda al fuego interno que todos llevamos, ayudando a reconectar con la determinación, el deseo de avanzar y la confianza en uno mismo.




