La turmalina negra es una de las piedras protectoras más poderosas. Su energía crea un escudo contra las malas vibras, la envidia y cualquier influencia negativa del entorno. Además, ayuda a enraizar, aportando seguridad, estabilidad y calma en momentos de estrés. Es ideal para limpiar y purificar espacios, equilibrar el aura y mantener la mente clara y enfocada. Un amuleto imprescindible para quienes buscan protección y fortaleza interior.